Una fotocélula de seguridad para puertas es un dispositivo utilizado para garantizar la seguridad de las personas alrededor de una puerta automática, como las puertas de garaje, las puertas de acceso a edificios o las puertas correderas. Consiste en un par de sensores, uno emisor y otro receptor, que se colocan a ambos lados de la abertura de la puerta.
La fotocélula emite un haz de luz invisible hacia el receptor, y cuando este haz se interrumpe, generalmente por la presencia de una persona, mascota u objeto en el camino, el sistema de la puerta se detiene o se invierte automáticamente para evitar el cierre o aplastamiento. Esta característica de seguridad es esencial para prevenir accidentes y lesiones.
Las fotocélulas de seguridad son muy comunes en las puertas automáticas modernas y son requeridas por las normativas de seguridad en muchos lugares. Además de la función de detección de obstáculos, algunas fotocélulas también pueden tener características adicionales, como la capacidad de ajustar la sensibilidad, la inmunidad a la luz ambiental o la comunicación con otros dispositivos de seguridad.
Es importante asegurarse de que las fotocélulas de seguridad estén instaladas correctamente y se mantengan en buen estado de funcionamiento para garantizar la protección adecuada al utilizar puertas automáticas. Siempre es recomendable seguir las instrucciones del fabricante y realizar un mantenimiento regular del sistema de seguridad de la puerta.
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